Actividad de Jezreel – Los Jardines del Valle en Caracas-Venezuela
Antes
Previo a la ejecución sostuvimos las reuniones con los líderes y ministros de la zona del Valle, y ellos a su vez con las personas responsables del Consejo Comunal que administra las instalaciones de la cancha donde decidimos llevar a cabo la actividad. Al igual que en los otros sectores hicimos mesas de trabajo, coordinamos la logística de equipos, personas, materiales y comida necesarios para vivenciar esta experiencia con niños de los Jardines del Valle. Se llevó a cabo un tiempo de promoción y publicidad e inscripción de niños acompañados de sus representantes y finalmente, aunque se inscribieron 50 niños, terminaron asistiendo 45 de ellos.
Durante
La actividad en el sector El Valle se llevó a cabo durante cuatro sábados del mes de abril, todas las mañanas, resultó un tiempo muy refrescante, y distinto. Cada semilla sembrada son características que en la medida que vayan creciendo y las apliquen distinguirán a estos niños en su generación. Solo meditar en cuanto transforma e impacta el poder del amor, o quizás de la obediencia como principios rectores de la vida, nos alientan para continuar realizando este trabajo de enseñanza.
En cada sesión se enseñaron dos valores, y el último día se ministro el principio de obediencia más la obra de teatro: El Fantástico mundo de Jezreel, que hace referencia a las siete semillas. En particular en esta actividad al cierre realizamos algunas entrevistas a los niños participantes y cada uno explicaba el personaje de la obra que más le gusto o la semillita que le impactó, como organizadores nos impresionó el poder escuchar de cada niño estas expresiones sobre esta experiencia al ver cómo les quedó fijada la canción o el juego, o quizás un personaje, y por supuesto que no faltó quien dijo: “lo que más me gusto fue la merienda”, así son los niños.
Agradecemos a cada maestro, a los ministros y líderes del sector, a los miembros del equipo de teatro, a cada servidor y a las familias que permitieron la participación de sus hijos, esperamos que continúen fortaleciendo la enseñanza impartida.
Y a todo este grupo de niños le entregamos dos cotillones una de dulces y otro con el kit de franela, cooler y cartuchera, como un detalle de la fundación.
Fue una experiencia que deja huellas.